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Las piscinas en las residencias para mayores están siendo, cada vez, un servicio más demandado por residentes y familiares. Este tipo de instalaciones mejoran la calidad de vida, física y psicológica de los ancianos a través de diferentes actividades, generalmente practicadas en grupos. A continuación, profundizaremos un poco más en los diferentes beneficios que aportan las terapias en piscina.
Mejoras en la motricidad y al sistema cardiovascular.
El agua ofrece un espacio donde el peso del cuerpo se siente menor y, por lo tanto, las personas con problemas de movilidad, se sentirán más seguros. Por ello, pueden realizar determinados ejercicios que, fuera del agua no podrían, así como alargar las sesiones de terapia.
La menor sobrecarga física y la prolongación en el tiempo del ejercicio permite mejorar el equilibrio y la resistencia, así como activar el corazón. Por otro lado, reduce las molestias producidas por el ejercicio “en seco” al disminuir la sensación de peso del propio cuerpo.
Espacio de socialización y seguridad propia.
Como hemos comentado, a menudo estas prácticas se desarrollan en grupo, lo que fomenta la interacción entre las personas, en un ambiente más relajado.
Por otro lado, al realizar ciertos ejercicios que de otra manera no podrían realizar, la autoestima, la confianza y la seguridad se ven reforzados lo que supone una clara ventaja si se proyecta a otros ámbitos del día a día.
¿Qué ejercicios realizar?
Generalmente, cualquier ejercicio destinado a mover el propio cuerpo y mejorar la movilidad articular son los aceptados y adecuados para llevar a cabo en las piscinas de las residencias de mayores, pero siempre deben ser supervisados por un equipo de profesionales médicos que garanticen la seguridad y salud de los asistentes. Como ejercicios frecuentes tenemos:
- Caminar en el agua
- Pedalear en el agua
- Movimientos articulares
Por todo lo anterior, una piscina en una residencia para mayores es algo muy positivo que solo aporta beneficios y contribuye a elevar el nivel de felicidad de los ancianos.
Desde innowater, queremos recordar que, a pesar de todos los beneficios que aportan las terapias acuáticas a los ancianos, proporcionar la mayor calidad del agua también debe ser una prioridad. Por ello, recomendamos la cloración salina como mejor método de desinfección del agua ya que, además de ser eficiente y ecológico, es respetuoso con las personas, evitando irritaciones y molestias en la piel como las que produce la cloración química.
Si quieres más información sobre nuestros cloradores salinos, visítanos en www.innowater.es
